Mis ganas de vivir
Yo ya no podía llenar todos tus días de felicidad, reconstruir un autoestima que no existía en realidad; yo no era arquitecto ni ingeniero y tu tu eras un complicado diseño para un albañil que quería solo cubrir de cemento; yo ya no podía comprarte ni venderte ganas de vivir, me causaba culpa verte caer mientras fingías sonreír, yo sabía que te querías morir, pero todos sabemos que nunca te pude contagiar mis ganas de vivir
Comentarios
Publicar un comentario