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Mostrando entradas de octubre, 2018

Sin temor

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Corrió y corrió por el bosque, las ramas le amorataban los brazos, el lodo le subía por las piernas, piedad imploraba de pronto, y vio su dignidad arrebatada. Los lobos le arrancaron el vestido, los cuervos le cegaron esa noche, el veneno se metía en su alma, los gusanos se comieron sus entrañas, y esa misma noche le cambio el destino. Un día se levanto de una caída, de un pozo al que cayó sin darse cuenta, aunque pudo recuperar sus cinco sentidos, no pudo quitar las cicatrices, ni las manchas del vestido. Corrió y corrió por otros caminos, trato de cambiar su destino, no pudo olvidar esa noche en una vida, las sombras por las noches le seguían, y volvió a hundirse en arenas movedizas. Trato de levantarse una vez más, le juzgaron sin piedad y sin perdón, hubo un día y mil noches de terror, pero no hubo salvación, nunca la oscuridad le dejó. Probó el perdón de muchas formas, ya entrada en el bosque y sin temor, cu

Puede más

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Y me estremezco por precaución  y me altero con gran resolución hoy pensé en no contestarte,  pero no va a ser mi culpa si esto no funciona, me agarro con fuerzas del corazón, me amarro los miedos y el rencor cargo con ellos para no olvidarlos, sin embargo por confiar en ti intento superarlos, inhalo, exhalo y me dejo llevar otra vez, yace algo roto y pegado con perdón en mi interior me pueden las dudas y los errores, las deudas que creaste con las traiciones me duelen los clavos de las discusiones pero me puede más el presentimiento de que así es el amor puede más la duda de si seré suficiente en esta ocasión; tal vez es lo único que detiene esta relación, saber que entre tanto miedo no hay lugar para los dos.

Turbulencias

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Y es que ya lo sabía, que ibas a empezar a extrañar, que ibas a buscar; y es que ya lo esperaba, te ibas a arrepentir, ibas a reflexionar; pero no esperaba esto, no esperaba querer vengarme, no esperaba ya no desearte; porque te quiero con toda el alma y todo el miedo, porque te espere mas meses de los que el amor duraba, y es que yo sabía que ya no te quería tanto ni tan fuerte, pero hay huellas que ni el tiempo ni el viento desaparecen, y es que yo quería pensar que no eras mi alma gemela,  sentir que no te conozco de muchas otras vidas,  pero el orgullo no es suficiente para repelerte, me dejaste, me lastimaste y ahora que vuelves,  con la mas grande quietud y por obra del destino no puedo evitar sentir una calma que no debiera sentir contigo. Yo esperaba turbulencias, pero no la confusión.