Y se pega contra los muros, se cuelga de las rejas mientras grita sin que algo se le entienda; y se arranca la piel y el cabello y da vueltas en esa jaulilla que sabe a encierro, pero nadie escucha ni dice nada, pero nadie se conmueve de que la carne en rojo vivo arrastra; es que es otra especie, es algo inhumano, que irónico saber que eso no tiene sentido alguno, que el que esta sufriendo, que el que esta llorando, no importa nada por ser de otra manada, y se revuelca en el suelo entre lodo, como sufriendo por no ser comprendido y se vuelve loco mientras le contemplas, del otro lado de la reja, siendo libre por haber nacido en otro eslabón de la cadena, por ser victimario y no victima, por ser tan humano entre comillas, mientras el animal se muere frente a tus pupilas, en un lugar que solo existe para entretenerte, que se llama zoológico, para el animal es más como una cámara mortuoria.
Y se pega contra los muros, se cuelga de las rejas mientras grita sin que algo se le entienda; y se arranca la piel y el cabello y da vueltas en esa jaulilla que sabe a encierro, pero nadie escucha ni dice nada, pero nadie se conmueve de que la carne en rojo vivo arrastra; es que es otra especie, es algo inhumano, que irónico saber que eso no tiene sentido alguno, que el que esta sufriendo, que el que esta llorando, no importa nada por ser de otra manada, y se revuelca en el suelo entre lodo, como sufriendo por no ser comprendido y se vuelve loco mientras le contemplas, del otro lado de la reja, siendo libre por haber nacido en otro eslabón de la cadena, por ser victimario y no victima, por ser tan humano entre comillas, mientras el animal se muere frente a tus pupilas, en un lugar que solo existe para entretenerte, que se llama zoológico, para el animal es más como una cámara mortuoria.
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