Aprendí
Aprendí a
despedirme dando motivos, pero como tu no escuchas, bien podría irme dando un
portazo y es que todo se fracturo en unos días, pero que mas da si eso no impide
que te allá querido, me volví adicta de tus palabras, sigo irónicamente jugando
a decir que no te quiero, puedo seguir mintiéndome y decir que todo lo que
sentí por ti desapareció con el tiempo, pero aquí estoy, esperando alguien
igual a ti, con la diferencia de que ahora estoy dispuesta a hablar y estoy
buscando a alguien dispuesto a escuchar, y la compulsión a fumarme tus palabras
no se me quita, pero tendría que ir buscando remedio a mi adicción a ti, pensar
todos los días que pudo funcionar, ya sabes que cuando algo se nos mete en la
cabeza nadie lo saca, tenemos eso en común, pero un día desperté con algo
diferente en la cabeza, y todo se nos acabo, tu en tu afán de conservar tu
capricho, yo en mi intento de satisfacer el antojo del momento, terminamos con
esto, ni yo supe que decirte, ni tu querías escucharme, aprendí que ya da igual
que hubiera funcionado, ni tu ni yo lo quisimos
así.
Comentarios
Publicar un comentario