No caigas en el juego

No deberías ceder tanto, pues el capricho sólo eso y quién te mereces entenderá que no siempre es su voluntad, no deberías procurar tanto tu apariencia, la pulcritud debe ser suficiente para llamar la atención por tu verdadera naturaleza, no,  no enaltezcas demasiado, tampoco llenes de regalos, no se necesita tanta altanería para que se quede quién realmente te quiere; por favor no caigas en el juego de las adivinanzas, ni es tu obligación, ni estás para compensar la falta de comunicación, quién de ti y desee algo debería poder expresarlo: sobre todo mantén la dignidad que ninguna seudo princesa abuse de tu caballerosidad; ni sirviente, ni esclavo, sólo enamorado.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Te daré unfollow

Hazte responsable