Ya no te culpo de nada

Me salvaste y nunca te lo agradecí, pero después fuiste tu quien me hundiste, como no ser ambivalente, como saber reaccionar, tu lo sabes, fue una caída libre, no se si pensaste en algún momento en lo frágil que era yo, en lo mucho que dolió, pero hoy aun quedan cicatrices, ya no soy la niña triste, pero como en todo conflicto quedan secuelas, una enorme dificultad para relacionarme, una incapacidad para confiar en las personas, memorias de un par de años que hoy solo causan nostalgia; ya no pasa nada, ya no me cuesta tanto expresarme, ya no te culpo de nada...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Te daré unfollow

Hazte responsable